Crónicas de peces

Voy a contaros una historia de dos poblaciones de peces, dos situaciones que he vivido recientemente, que están pasando. Me gustaría decir que sólo son un ejemplo, pero me temo que son un reflejo de muchas otras situaciones.

La primera es la de los ciprínidos del río Duero y sus afluentes en sus tramos finales antes de entrar a Portugal. Se trata de un río que atraviesa la península Ibérica de este a oeste y de sus contribuyentes que desaguan la vertiente sur de la cornisa Cantábrica, todos están completamente regulados por presas desde hace muchas décadas. La función original de estos represamientos ha sido el aprovechamiento hidroeléctrico de sus aguas, aunque secundariamente se les haya dado otras funciones. Pero siguen siendo los productores de energía, como en el resto de grandes embalses que en poco menos de medio siglo colapsaron todas las cuencas de los ríos españoles, los que manejan los caudales circulantes por el río desde sus intereses comerciales y condicionados solo por las aportaciones publiométricas anuales y por la obligación de unos ramplones caudales ecológicos.

Desde hace más de 20 años un directivo de una empresa que se dedica a explotar estos embalses, se ha preocupado de que las poblaciones de peces aguas abajo de sus presas tengan unas condiciones que permitan su supervivencia; repito: tan solo una persona, y a nivel individual, se ha comprometido a que las aguas que discurren por un río tan maltratado como el Duero en ese tramo no se pudran por falta de caudales que diluyan la contaminación y permitan la oxigenación de sus aguas. Sin esa gestión de caudales desde los afluentes al cauce principal, este año de pocas lluvias y de consumo de agua incontrolado, es más que posible que se hubiera producido una gran mortandad de peces.

Que se encuentren personas comprometidas con el mantenimiento de la calidad del agua no pasa en todas las compañías hidroeléctricas, de hecho es una excepción. Se exigen caudales mínimos ecológicos, pero no se habla de la calidad del agua que llevan, una suelta de agua con poco oxígeno (anóxica) de las capas bajas de un embalse puede producir una grave mortandad.

La otra historia de peces se desarrolla a más de 6.000 km. de distancia, a estas poblaciones de peces no les falta agua de calidad, pero también dependen de la voluntad de una persona para su supervivencia. Al noroeste de la República Dominicana,en la provincia de Samaná, encontramos la reserva de Cabo Cabrón un área marítima protegida creada en 1996. Tiene tres figuras relevantes de protección Parque Nacional, Reserva Nacional y Reserva de la Fauna Salvaje. Te das cuenta de la inutilidad de estas medidas de protección cuando te sumerges en sus maravillosos paisajes submarinos y descubres que pocos de los peces que los habitan miden más de 15 cm., el día que llegué a la zona de inmersión me encontré una barca con un compresor en marcha y dos largos tubos que lo conectaban a sendos pescadores que armados con sus fusiles de pesca submarina cazaban cualquier ser vivo que estuviera a su alcance. La decisión de que esto pase, según parece, la tomó alguno de los responsables de la administración local sin tener en cuenta la normativa nacional.

Me pregunto cuales son los motivos por los que el hombre se puede comprometer (o no) con la conservación del medio ambiente. En los dos casos he descartado los motivos de desarrollo económico, cultural o educacional, ya que la distancia entre uno y otro país en estos asuntos es amplia y las decisiones al final quedan a expensas de una persona, aunque supongo que existirán otros motivos espurios como los políticos y la avaricia de unos pocos y la indolencia de otros muchos; creo que fundamentalmente son motivos de voluntad personal los que afectan en una o otra medida a la conservación medio natural. Los mismos que llevan a extralimitarse a un agricultor con la dosis de glifosato o pesticida, a regar una tierra sin sembrar (este año de sequía se sigue haciendo en la comunidad de Castilla y León y no es tan raro si pensamos en el negocio de los derechos del agua), a dejarte la vida en una actividad tan peligrosa como el buceo con compresor sin ninguna medida de seguridad o a participar altruistamente en un una campaña para eliminar peces león de los arrecifes caribeños (una especie invasora exótica que está causando graves problemas a las poblaciones).

Podría haber sido menos pesimista al escribir este artículo, pero no me ha salido, para endulzarnos la vida ya están las campañas publicitarias de las compañías eléctricas o turísticas. Bien que lo siento.

Ernesto Cardoso

Temporada 4. Capítulo 19Buceo en el Caribe
Fecha de grabaciónJulio de 2022
Duración3:23 minutos
Fecha de emisión14 de septiembre de 2022
LocalizaciónLas Galeras, Samaná. República Dominicana
Imagen y sonidoErnesto Cardoso
Montaje y ediciónErnesto Cardoso
OpúsculoErnesto Cardoso
MúsicaAdvent Chamber Orchestra
TemaEntrance to the Queen of Saba
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